viernes, 25 de noviembre de 2016
Deseos atropellados
Derramo sobre espaldas ajenas toda la rabia contenida.
Desvanecida.
Me río de las musas que entre bailes y sollozos señalan el camino de vuelta a casa.
Destrozo las dudas asesinas y me proclamo triste vendedora de una lucha sin aplausos.
Difícil situar entre tiempo y espacio un punto que indique cuándo y dónde tropecé.
Fueron tantos los errores cometidos...
Ondeaban banderas sobre mi tejado, con frases libertarias ya olvidadas, junto a la ropa tendida, impregnada de fluidos difusos de procedencia no identificada.
Atropellados tus deseos, llené de sucias mentiras los pocos resquicios de tu fe que aún quedaban intactos.
Y bajo tu cuerpo aún caliente, esconde a barridas tu entrega, tu risa, y el amanecer desde tu playa.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario